"un ca-fe
con dios"
Rvdo. José L. Báez báez
Gn 1,27
Introducción: "Eso no es na', que se pongan una máscara o compren unos dulces". Eso de no dejar a nuestros hijos participar de estas fiestas es "ser un fanático", "eso no es na'. "Es una fiesta con los nenes de la iglesia y solo es un compartir y nosotros vamos a estar", "eso no es na'. "Además, ¿Cuál es el pecado?", si eso no es na'.
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Jueces 6.1-10
Hacer lo malo, ante los ojos de Dios, implica pecado. Provoca que como, los hijos de Israel, estemos viviendo a escondidas de Dios. Significa que todo lo que plantemos o sembremos sea atacado. En cada ataque los hijos/hijas de Dios lo perdían todo. La realidad es que nada quedaba ni para comer. Hacer lo malo para este pueblo fue vivir sin acordarse de Dios. Vivir a su manera, a su estilo, desde sus propias visiones. Vivir así es empobrecernos cada día. ¿Cuándo está Dios en nuestros asuntos familiares? ¿Cuándo en nuestras decisiones? ¿Hace cuánto la gente se ha olvidado de Dios para vivir como quieren? Los tiempos de crisis llegaron a los hijos de Israel y cuando los días se llenaron de hambre, angustia y tristeza, entonces "clamaron a Dios" a causa de su crisis. Isaías 41.13
1. Tienes un Dios que te ayuda. No dudes que Dios extiende su mano sobre ti. Hoy es una nueva oportunidad para mirar con esperanza la vida. Dios te ayuda. ¿Lo puedes creer? Solamente deja que Dios sea tu ayuda verás cómo te guía. Nunca he visto justo desamparado, dice el salmista. Salmo 12.1-7
Ciertamente, debemos continuar clamando, suplicando a Dios su cuidado, ante la maldad rampante que se manifiesta impunemente en la humanidad. No hay sinceridad en la sociedad, pero como el salmista, no nos resignamos a ver la gente piadosa y fiel sufrir por causa de esas actitudes impropias y destructivas del mundo. Es por ello que el salmista alega que se acabaron los piadosos y desaparecieron los fieles. Así como este salmo refleja el lenguaje de la problemática de la historia de Israel, también es la nuestra. Ante ello hay una palabra de aliento y esperanza. Sal 37.3-8
Confiar en Dios es vivir convencido de que todo está en sus manos. Cuando confiamos en Dios disponemos espiritualmente en la entrega, sin reserva alguna, a sus cuidados, para que nuestra vida esté en victoria. 1. Confiar es aceptar la autoridad de Dios. Quien descansa en la autoridad de Dios no se desespera, sino espera. 2. Confiar es creer que la sabiduría de Dios actúa en favor nuestro. 3. Confiar es dejar que el poder de Dios haga posible lo imposible para mí. Es dejar que los propósitos y planes de Dios se cumplan. 4. Confiar es creer que Dios es el que provee. 5. Confiar es amar a Dios porque ya nos amó primero. Ese amor puro y de entrega es mi confianza. 6. Confiar es vivir por fe y en fe. Oremos: Dios de la vida y de amor eterno. Te doy gracias por tu expresión más hermosa para el ser humano, la vida. Te doy gracias por ese amor para nosotros. Te doy gracias porque mi confianza está en quien eres. En el nombre de Jesús, amén. Recuerdo, de pequeño en edad, que iba por el campo y un mosquito entró sin permiso en mi ojo. Aquello fue un momento de mucha ansiedad, picor y ardor. Aquel mosquito provocó que yo me detuviera y comenzara a frotar con mis manos el ojo. Traté de sacarlo y no salía, llamé a mi hermano y no podía sacarlo, hasta que llegué a casa. Cuando llego a casa, de tanto frotarme el ojo, lo tenía hinchado. Como no me había visto, pensé que lo tenía rojo y cuando mami me vio me dijo: "tienes el ojo verde", así que se puede imaginar cómo me sentí. Lo tenía hinchado y verde. Bueno, como siempre, mami, me libró de las ataduras del mosquito, quien salió muerto de mi ojo. Me sentía incapacitado. No podía ver y no me había dado cuenta que con mis propias manos me había hecho daño. Así que agradecí a mami por librarme de aquella tortura.
2 Timoteo 1.7
Vivimos en una sociedad llena de ansiedad. Cuando la gente se pone así es porque ignora lo que sucederá y percibe la incertidumbre. La ansiedad es como un miedo sin causa evidente. Jesús sabía que el ser humano podía enfrentar ese tipo de situación así que en el Sermón del Monte, habló de que no nos preocupáramos por el mañana y que no amontonaremos tesoros en esta tierra; esto es confianza. NO me malinterprete. Ud prepárese, ya sabe que hablo desde otras perspectiva. 1 Corintios 10.12
Vimos de qué forma las personas podemos decaer espiritualmente. Ahora veamos la forma de evitar deteriorarnos espiritualmente. Recuerde que éstas son algunas, existen muchas más. - Debemos comenzar por renunciar a la mentira viciosa según la cual es suficiente con tener un poco de relación con Dios. No podemos estar diciendo que "es que yo le sirvo". No se crea la mentira de que porque va al templo los domingos o los días de semana es suficiente. La relación con Dios no se mide en días sino en un vivir continuo en su santidad. El 98% de santidad no es suficiente. Lo entregas todo o nada. Hay gente que dice que está en un proceso, pues no hay problema, pero tiene que ser un proceso progresivo y no estancado. Deje de estar diciendo que está en un proceso para seguir haciendo lo que desea. O caminamos en total obediencia a Dios o no caminamos en obediencia. La obediencia es total, pero a media no puede ser. Alguien dijo: "No le damos nada al Señor sino le damos todo". Si no le has dado todo lo que eres al Señor no le has dado nada. 1 Corintios 10.12
Cada día es un buen momento para no dejarnos arrastrar por la decadencia o el deterioro espiritual. Cuando hablamos de decadencia, lo hacemos desde el deterioro o declinación de nuestras vidas. Una de las advertencias o señales que debemos mirar es: - "yo no soy una persona mala o destructiva". Sin embargo no puede llevar una vida cristiana dinámica. Si no tienes motivos para estar en Cristo, ya estás en la decadencia espiritual. Cuando hablamos de "lazo" en la Biblia, nos referimos a lo que nos puede atrapar, agarrarnos cuando hemos bajado la guarda y hacernos tropezar. En Efesios 6,11 el escritor se refiere a las asechanzas del diablo. Los lazos del enemigos vienen con pequeñas mentiras. No dirá una mentira grande porque lo reconoceríamos inmediatamente, sino que lo hace sutilmente. Las dudas que el enemigo nos trae son una a la vez. Va poco a poco hasta colocarnos en los espacios semi-oscuros, no en un lado blanco u oscuro sino un poco gris. Cuando la gente actúa de una forma que no debe y "no se da cuenta" o sabe que está mal y lo sigue haciendo ha entrado en el lazo. Los ataques del enemigo nos coloca en la nube de las (D): Debate, División y Duda.
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AutorPastor José Báez Báez Categorías
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September 2017
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