"un ca-fe
con dios"
Rvdo. José L. Báez báez
"Siempre te sustentaré..." Isaías 41.10
Dios no nos ha dicho que no nos caeríamos. Eses es uno de nuestros temores. Sin embargo, ha dicho que te sustentará. Confiar en Dios y permitir que nos sustente es dejar que su poder actúe en nosotros. Podrás pasar por momentos en los que te sientas derribados pero jamás destruido. El problema no es caer sino levantar. Si no sabes cómo levantarte yo te exhorto que permitas que Dios lo haga. Oremos: Dios que sostienes nuestros días. Gracias por tu sustento en cada momento. Sé que me muestras tu misericordia cada mañana y me llenas de paz para cada paso. Que tu me sustentes siempre me llena de esperanza. En el nombre de Jesús, susténtanos a todos/as, amén.
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2 No hay santo como Jehová; porque no hay nadie fuera de ti ni refugio como el Dios nuestro. 3 No multipliquéis las palabras de orgullo y altanería; cesen las palabras arrogantes de vuestra boca, porque Jehová es el Dios que todo lo sabe y a él le toca pesar las acciones. 4 Los arcos de los fuertes se han quebrado y los débiles se ciñen de vigor. 5 Los saciados se alquilan por pan y los hambrientos dejan de tener hambre; hasta la estéril da a luz siete veces, mas la que tenía muchos hijos languidece. 6 Jehová da la muerte y la vida; hace descender al seol y retornar. 7 Jehová empobrece y enriquece, abate y enaltece. 8 Él levanta del polvo al pobre; alza del basurero al menesteroso, para hacerlo sentar con príncipes y heredar un sitio de honor. Porque de Jehová son las columnas de la tierra; él afirmó sobre ellas el mundo. [1] Los cuatro atributos que Ana destaca de Dios son gloriosos: 1. No hay Santo como Dios 2. NO hay Refugio, es decir, Roca como el Dios nuestro 3. NO hay saber como el de Dios (todo lo sabe) 4. NO hay justicia como la de mi Dios (pesa las acciones) Dios es descrito de esa manera porque Ana pudo decir que Dios levantó su frente. ¿Imagina las manos de Dios tocando su cara y levantando su rostro? Eso fue lo que ocurrió con Ana. La reputación de Ana, por no tener hijos, estaba en la boca de todos/as, pero Dios la levantó y la dignificó. Dios cierra la boca a quienes se levantan en rebeldía contra él. Es una advertencia que no se puede evadir. El que crea que tiene poder sobre todas las cosas será debilitado y su poder será otorgado al débil. Ana fue humillada hasta el polvo pero Dios levanta de donde sea al menesteroso. El Dios que describe Ana hace justo juicio y da honor a quien no tiene. Mi Dios es dueño de la vida. Los lugares de honor no son definido terrenalmente sino celestialmente. Procuremos los lugares de honor en la Patria Celestial y no en la terrenal. Aquí el honor es efímero pero en el cielo es Eterno. Dios es incomparable y ello le hace la Roca de la Eternidad. Dios le permitió a Ana tener siete hijos porque el siete es símbolo de lo que está completo. Aquella mujer desacreditada por la sociedad fue levantada al lugar de honor. No temas por si la tierra tiembla pues Dios la sostiene. Dios sostiene todo con su poder. Oremos: Dios y Padre de toda misericordia. Tú das el pago según las obras pero las obras no equivalen a salvación. Tú has levantado nuestras vidas de toda tierra y lugar desacreditado. Gracias por tu amor y bondad. Eres Santo, Roca, Hacedor de Maravillas, Conocedor de toda sabiduría y Justo. En tu nombre afirmo mi fe en ti y me acerco para santificarme cada día. En el nombre de Jesús, amén. [1] Reina Valera Revisada (1995) Bible Text. (1998). (1 Sm 2.2–8). Miami: Sociedades Biblicas Unidas. Salmo 54.4"Dios es el que me ayuda...
Lo más hermoso es tener a Dios de nuestro lado. Hay momentos en que la turbación y la angustia pueden sobrecoger nuestro ser. Son esos momentos en los que se nos sacude el alma. Son momentos en los que nos confronta la acción de Jesucristo y la nuestra. Cuando amamos a Dios sobre todas las cosas debemos cuidar nuestros actos. Actuar sin preguntarnos, ¿qué haría Jesucristo?, puede llevarnos a malas decisiones. No es dejar pasar, ni es permitir, mas bien, tener la mirada compasiva que Jesús tuvo con todos y todas. Jesús es quien nos ayuda. Quisiera destacar que cuando Jesús nos ayuda no nos deja en las mismas condiciones. Jesús nos ayuda y nos deja claro "vete y no peques más". Es que la ayuda de Jesús se remite a los cambios y la transformación. Quien practica el pecado no es de Dios. El perdón de Dios es más grande que mis prejuicios. El amor de Dios no tuvo favoritos. Antes de asumir posturas que llevemos por dentro debemos asumir la postura del Cristo perdonador. En cualquier momento Dios puede hacer un cambio en cualquier persona. No detengamos con nuestros actos la misericordia de Dios. Cuando amamos a Dios sobre todas las cosas nos arde el corazón por servirle. Nos arde el celo por su casa y sus espacios, pero ese ardor no debe cegarnos porque al fin y al cabo todo es de Dios y él se encarga de todas las cosas. No tomes venganza de nada. Dios te ayuda. Aunque el enemigo trate de dañar o destruir su imagen no será posible porque Dios es tu ayuda. Oremos: Dios y Padre de la vida. Dios bueno y misericordioso. En tus manos está mi vida. Gracias por todo lo que has hecho y harás. Estamos ante ti porque un día tuviste misericordia y no nos arrancaste de esta tierra. Ayúdanos cada día a caminar y ver de la manera en que tú, Jesús, lo hacías. En el nombre de Jesús, amén. Los beneficios de Dios no se comparan con ninguna oferta humana. Veamos lo que señala el siguiente Salmo:
Salmo 103 1 Bendice, oh alma mía, a Jehovah. Bendiga todo mi ser su santo nombre. 2 Bendice, oh alma mía, a Jehovah, y no olvides ninguno de sus beneficios. 3 El es quien perdona todas tus iniquidades, el que sana todas tus dolencias, 4 el que rescata del hoyo tu vida, el que te corona de favores y de misericordia; 5 el que sacia con bien tus anhelos, de modo que te rejuvenezcas como el águila. Cuando Dios nos bendice nos hace un favor. Exalta a Dios desde tu alma. Eso implica el cuerpo, el ser completo su santo nombre. Es todo lo que tiene vida. ¿Cuáles son los beneficios? 1. Te perdona. No olvides que te perdona y eso no es el perdón de quienes no olvidan. Su perdón no tiene espacio para volver a recordar tu iniquidad. Nuestro pecado ha sido tocado por la misericordia de Dios. 2. Sana tus dolencias. No olvides que sana tus dolencias. NO importa si estas son del alma, del cuerpo, de la mente, del corazón, etc. Las dolencias no tienen límite, pero Dios las sana con su poder ilimitado. En Dios no se detiene la fuente sanadora. 3. El que rescata del hoyo tu vida. Cuando hablamos de rescatar nos referimos a librar. Se rescata lo que está perdido, lo que se han robado, etc. Yo sé que mi vida fue rescatada del hoyo del pecado. La vida en sí misma no puede existir en el hoyo porque es para vivir. Nada en un hoyo tiene sentido. Lo que habita en un hoyo debe salir a la luz. Los hoyos tienen sus elemento de oscuridad. Dios rescata tu vida del hoyo. Déjame decirte: "Dios rescata tu vida del hoyo". 4. Te corona de favores y misericordias. La coronación es señal de la victoria. La coronación no está llena de éxitos sino de favores y misericordias. Los favores son aquellas cosas que no merecemos y la misericordia es la manera en que Dios coloca en su corazón nuestra miseria. "Por lo tanto, nuestra corona está compuesta de la acción salvífica de Dios en nuestra miseria pecaminosa. Es una corona no merecida y está ubicada en las entrañas de Dios", (José Luis Báez, pastor) 5. El que sacia de bien tus anhelos, es decir tu boca. Saciar es llenar, es completar, es bienestar lo que soñamos, lo que colocamos en fe. Si sacia de bien nuestras vidas, entonces, hay quien sacie de mal nuestros anhelos. Dios tiene deseos de saciar de bien tu vida. 6. De modo que rejuvenezcas como el águila. ¿Qué se tiene que renovar en ti? Las dificultades y las adversidades solían envejecer la imagen del pueblo. "El rejuvenecer no consiste en regresar las experiencias de la vida sino en volver a revitalizarnos en el presente para seguir viviendo", (José Luis Báez). En ti hay la esperanza de volver a rejuvenecer. Nunca es tarde para traer a la memoria los beneficios de Dios. Su amor y bondad no pueden ser olvidados. Oremos: Dios de favores y misericordias. Sé que en ti hay beneficios. Nuestra victoria no es qué hagamos sino que tú hiciste por nuestra salvación. Permite que mientras viva mi memoria no se desvanezca para siempre recordar tus beneficios. En el nombre de Jesús, el mayor beneficio para nuestras vidas, amén. "Pacientemente esperé a Jehová, y se inclinó a mí, y oyó mi clamor. Y me hizo sacar del pozo de la desesperación, del lodo cenagoso; puso mis pies sobre peña, y enderezó mis pasos. Puso luego en mi boca cántico nuevo, Verán esto muchos y temerán, y confiarán en Jehová". Salmo 40.1-3
Todos y todas nos hemos encontrado en apuros. El alivio que esperaba el salmista estaba en Dios y solo en él. El alivio no llegó rápido, pero esperó pacientemente. El motivo de mi esperanza está en que Dios nos escucha. Cuando esperamos en Dios hay una enseñanza segura. Dios se inclinará, es decir, te atenderá como quien atiende a su hijo y oirá lo que le quieres decir. Dios oirá tu situación por difícil que sea. ¿Cuál es tu pozo de desesperación? 1. Dios te hace salir de ese pozo de desesperación 2. pone o coloca tus pies sobre un lugar seguro 3. endereza tus pasos Cuando la mano de Dios asiste nuestros procesos su fin es derecho. Quienes hemos caminado en lugares llenos de lodo sabemos que es muy difícil dar un paso firme. Mucho menos es posible afirmar los pasos. ¿Se imagina a Dios sacando sus pies del lodo, colocándolos sobre la peña y enderezando tus pasos? Quizás tu desesperación sea grande pero jamás es más grande que el Dios que puede sacarte de ahí. Es posible, salir del lodo, si tu confianza está en lo que Dios puede hacer y no en tus pasos torcidos. Si estás en el lodo cenagoso tus pasos no son firmes ni derechos y esa es la razón por la que no sales. Si piensas que estando en el lodo das pasos firmes te invito a que te llenes de humildad y reconozcas que no es así y que Dios puede darte esa esperanza. No podemos dar pasos firmes en los lugares que nuestra propia debilidad nos colocó. Dios pondrá un cantico nuevo. Quiere decir que hará de tu clamor un cántico. En el lodo el clamor es desesperante pero sobre la peña el cántico es nuevo. La obra que Dios haga en ti será lo que vean los demás y ello les llevará a mirar y confiar en Dios. Oremos: Dios y Padre amado. Tuya es la gloria y toda la honra. Nuestro clamor está delante de ti pero yo tengo la esperanza de que tú me oirás. No tengo duda de lo que harás y sí estoy seguro de que podré cantar con la alegría y el gozo de haberte creído. Mis pasos están en tus manos. Te alabaré y te exaltaré desde lo más profundo del corazón. No confío en mis fuerzas y mis capacidades sino en tu poder y tu mano. En el nombre de Jesús, amén. "Pero tú aumentarás mis fuerzas como las del búfalo; Seré ungido con aceite fresco". (Salmo 92.10) Cada día será la oportunidad para Dios elevar tus fuerzas como las del búfalo. El aceite fresco es el aceite nuevo. Ese aceite es símbolo de alegría y de la presencia de Dios a través del Espíritu Santo. Dios nos da motivos para estar contentos/as. Esa presencia de Dios es la que asegura tu victoria. Tus fuerzas serán aumentadas, no por tus capacidades, sino porque la presencia de Dios está contigo. De esa manera el poder de Dios será exaltado; y quien aumenta y unge es quien renueva, por lo tanto es a quien pertenece la victoria. Permite que Dios renueve o aumente tus fuerzas y te unja con aceite fresco para que su presencia te llene de gozo en medio de tu batalla. Oremos: Dios que afirmas nuestros pasos. Dios de toda gloria. Te alabo y te exalto por todas tus maravillas. Sé que hoy me darás fuerzas y seré ungido con aceite fresco. Así podré enfrentar mis batallas y alcanzar la victoria. En el nombre de Jesús, amén. www.icdcguaraguao.org "Bendeciré a Jehová que me aconseja; Aún en las noches me enseña mi conciencia. A Jehová he puesto siempre delante de mí; Porque está a mi diestra, no seré conmovido", Salmo 16.7-8
Entre los pasos de la vida nos hacemos de amigos y amigas que tienen su buen consejo. Sin embargo, David, afirma una bendición haber determinado que Dios fuera su consejero. Dios es el mejor consejero en los procesos de la vida. Aconseja para bien. Aún en las noches, destaca el salmista, me enseña conciencia. Eso solo lo hace Dios. No hay un mejor consejo que el que Dios te pueda dar. Esa es la razón por la que el salmista lo coloca delante de él. ¿Está Dios delante de ti? ¿Es Dios tu consejero? Pues es nuestro porque está a nuestra diestra, no seré conmovido. Ese es el secreto. Dios no permitirá que seas conmovido. Dios siempre corrige nuestras vidas y habla a nuestra conciencia. Dios nos hace bien y su consejo nos da esperanza. Oremos: Te bendeciré y te exaltaré mi Dios y mi Rey. Estamos delante de ti. Nuestro ser está delante de ti con alabanza. Si en la noche mi conciencia es aconsejada que siempre lo sea por tu palabra. Guíame en todo tiempo porque eres y estás a mi diestra. No seré conmovido y esperaré siempre en tu palabra ya sea de día o sea de noche. En el nombre del mejor consejero, Jesucristo, amén. "Os enseñaré a quién debéis temer: Temed a aquel que, después de haber quitado la vida, tiene poder de echar en el infierno. Sí, os digo, a este temed". Lucas 12.5
Me dirijo a todos y todas las que viven con temores y miedos que no les permiten caminar. Hay más vidas estancadas por tristezas y temores que por las realidades que enfrentan. No puede vivir en ruina espiritual quien le ha creído a nuestro Señor Jesucristo. ¿Qué es lo que debemos temer? Si Cristo está en nuestro corazón solo debemos temerle a él. La preocupación verdadera no está en qué beberemos o comeremos o vestiremos. Jesús ya nos ha dicho que somos importante y que primeramente es el reino de Dios y su justicia y lo demás viene por añadidura. Si hay algo que debe afirmarnos en la vida es que, al fin, nos guste o no, algunos lo nieguen o no, hay un infierno y seremos resucitados para salvación o para perdición. Creo que hay que vivir afirmando nuestra fe en Jesucristo y no olvidando lo que ocurrirá al final. Oremos: Dios que has enviado a tu hijo, Jesucristo, a favor nuestro. Nos afirmamos en ti y en ti queremos vivir. Que mi temor sea vivir correctamente en ti. En tu amor he creído y en tu bondad ha confiado mi alma. No te creemos, Jesús, para ir al cielo sino que iremos al cielo porque te creemos. En el nombre de Jesús, amén. En el día somos sostenidos por Dios. En la noche somos sostenidos por Dios. En Dios hay esperanza aunque no veas señal alguna. No necesitamos que Dios nos envíe una señal para él ser Dios. Dios es Dios no importa lo que acontezca. NO temas por lo que a simple vista no tiene solución. "Porque yo Jehová soy tu Dios, quien te sostiene de tu mano derecha, y te dice: No temas, yo te ayudo", Isaías 41.13 Oremos: Dios de la vida. Delante de ti estamos y esperamos. Nuestros días y nuestros pasos están en ti. Confiamos aunque no veamos. Tú no falta a quienes en ti confían. En el nombre de Jesús, amén. Y nadie echa remiendo de paño recio en vestido viejo; porque el tal remiendo tira del vestido, y se hace peor la rotura. Mateo 9.16
Este pasaje trata de una nueva enseñanza. Muchos habían criticado a Jesús pero Jesús reacciona con una nueva enseñanza. En esta ocasión la nueva enseñanza de Jesús no tiene cabida en los caducos sistemas religiosos existentes de la época y de hoy. Hoy los estudiantes y los maestros inician sus días de clase. Es por ello que les invito a dar y adquirir la nueva enseñanza. Para poder aprender hay que estar dispuesto a romper con viejos sistemas inculcados y caducos. No se puede aprender si en el corazón estamos predispuestos a no aprender. Jesús le estaba diciendo a los fariseos que para verdaderamente aprender algo no de podía estar poniendo remiendos y paños recios en el vestido viejo ya que la rotura es mayor. ¿No les parece que es mejor lo nuevo? Estudiantes y maestros y comunidad en pleno estemos dispuestos a la nueva enseñanza. No nos quedemos en sistemas viejos que no nos permiten aprender nada nuevo. Para que haya algo nuevo en tu vida debes dejar atrás lo viejo y permitir que Jesucristo entre a tu corazón y lo haga nuevo. Cuando nos acogemos a lo nuevo desechamos lo viejo. Jesús hace nueva todas las cosas en nuestras vidas. ¿Estás dispuesto/a a dejar todo lo viejo? Hoy es tiempo de aprender cosas nuevas y Jesús está dispuesto a enseñarlas. Lo viejo y lo nuevo no pueden coexistir. Jesús quiere de ti todo lo viejo para hacer de ti alguien nuevo. El ofrecimiento de Jesús sigue en pie y hoy es un buen día para empezar y aprender. Oremos: Dios y padre de todo ser vivo. Ayer fue un espacio de alegría y disfrute pero nos extendemos a lo que tenemos por delante. Estamos dispuestos/as a aprender algo nuevo. Guía nuestras vidas para que no se estanquen en sistemas caducos. Líbranos de ese aferrarnos del pasado y permítenos vivir una nueva experiencia hoy. Es el inicio de clases y te ruego que la experiencia este nuevo año sea uno de total aprendizaje. NO permitas que lo viejo en maestros/as y estudiantes estanque sus vidas. Hoy es un buen día para dejar los remiendos y abandonar lo viejo. En tu nombre, Jesús, amén. |
AutorPastor José Báez Báez Categorías
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September 2017
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