"un ca-fe
con dios"
Rvdo. José L. Báez báez
“Porque Faraón dirá de los hijos de Israel: Encerrados están en la tierra, el desierto los ha encerrado”. Éxodo 14.2
Faraón piensa eso pero Dios no piensa igual. El Faraón creía que el pueblo de Israel estaba perdido. Consideró que estaba encerrado en la tierra y el desierto. Había visto muchas plagas y la manera en que el Dios de los hebreos había utilizado a Moisés, sin embargo, no pudo resistir el dejar ir al pueblo. ¿Sabes que cuando otros piensan que no tienes alternativas Dios sí tiene alternativas para ti? Muchos pueden tener una mentalidad faraónica sobre ti. Puede que no vean en ti salida pero quién determina que no hay alternativas. Quizás sientas que tu vida no tiene alternativas ni salidas. Te sientes encerrado o te encerraste. No creas lo que dicen las voces contrarias. Ciertamente cuando Faraón se acerca da miedo y puede provocar que nos quejemos pero Dios no te permitió estar hoy para que mueras. Dios no te llevó al desierto sin esperanza sino para que aprendieras a creerle, para que aprendieras a depender de él. No desees la esclavitud. Prefiero morir en el desierto con Dios que en la servidumbre en Egipto. “NO temas, estad firmes y ved la salvación que Dios hará hoy con vosotros”, Ex 14.13. “Los egipcios que hoy has visto, nunca más para siempre los veras”. Si ya Dios te hizo libre no temas por los ataques que puedas ver a la distancia. Dios está con quienes le creen. NO pienses que ver todo cerrado implica que no puedes salir. Ver todo cerrado es el espacio para mirar a Dios y esperar por su salvación. No temas y estad firmes porque Dios hará algo hoy. ¡No lo dudes! Si Dios te saca de la esclavitud del pecado y te lleva al desierto, aunque desees la vida anterior, no vuelvas atrás porque lo que no tiene esperanza ante tus ojos es el espacio para un milagro. Oremos: Dios bueno. Sé que si me llevas al desierto es porque me sacarás de él. Tú eres el Dios que da vida. No hay duda que los momentos de esclavitud pueden sonar mejor que un poco de esfuerzo pero aunque el desierto se vea grande confío en ti y en el poder de tus fuerzas. Sé que me librarás de cualquier tentación que pueda seducirme para volver a la esclavitud del pecado. En ti estaré confiado aunque parezca que no hay alternativas y faraón se alegre. Tú eres quien me ayudará a enfrentar mi Mar Rojo. En el nombre de Jesús, amén.
1 Comment
Goyito
14/1/2016 04:06:21 am
Debemos de reconocer que muchas veces somos nosotros mismos los que limitamos el poder libertador de Dios. Que El nos da las alternativas pero no las vemos por la anciedad o por la poca Fe. El en su infinita misricordia nos recalca en su palabra:"Yo soy quien te manda que tengas valor y firmeza. No tengas miedo ni te desanimes porque yo, tu Senor y Dios, estare contigo donde quieras que vayas." Josue 1:9
Reply
Leave a Reply. |
AutorPastor José Báez Báez Categorías
All
Archivos
September 2017
|