Falsa esperanza

Nuestra esperanza está en el Señor. 

Hace unas semanas en nuestro país el pueblo se desparramó en los "juegos a de azar". Había promesa garantizada de una cantidad de millones. El pueblo encontró "una esperanza" en la oportunidad de ganar el premio. Amados hermanos/as, amigos y amigas no se dan cuenta que nuestro sustento es Dios. ¿Sabe cuántos padres y madres dejaron de comprar lo necesario en la casa para jugar? ¿Cuántos repartieron el premio que no se habían ganado? No nos engañemos y volvamos al Señor. Muchos jugaron considerando que era un pesito y otros diciendo que no es pecado. No entraré en ese juicio, pero estamos llamados a tomar en serio la vida. La vida y el sustento de nuestra familia no es un juego. Hay que ser responsables con los nuestros. El Señor le dijo al profeta: "Así ha dicho Jehová de los ejércitos: Meditad sobre vuestros caminos", Hageo 1.7. Buscamos mucho y hallamos poco... Meditemos sobre nuestros caminos y no coloquemos a la suerte la vida y el sustento de nuestra familia. Dios sabe de qué tenemos necesitad ¿porque mejor no acudimos a él?

Oremos: Padre celestial. Dios del oro y la plata. No apuesto en mi vida para vivir sino que vivo en ti para la vida. Eres mi sustento y no habrá juego de azar que me sacuda el alma y la conciencia. Gracias por darme lo necesario para vivir. Mas que gradecido por todo cuanto me das. Todo es ganancia. En tu nombre, Jesús, amén.