Dará su voz

"Y Jehová rugirá desde Sion, y dará su voz desde Jerusalén..., Pero Jehová será la esperanza de su pueblo...", Joel 3.16

La Palabra y la voz de Dios es temible para el enemigo. Es Palabra que destruye todo plan contrario, toda agenda oculta, toda maquinación, etc. De manera que ese rugir, aludiendo al león salvaje, es un retumbar como el trueno, y es la presencia activa de Dios en medio de la batalla. Ahora, para su remanente, ese rugir, esa Palabra es esperanza y fortaleza. Cuando Dios "da su voz" trae alegría, confianza porque es una voz creadora. Reconocer la voz de Dios en medio de nuestras batallas es afirmar la esperanza del pueblo. Entonces, agudicemos nuestros oídos y busquemos escuchar a Dios en medio del tumulto social en que vivimos. Su voz será a nuestro favor y esperanza a nuestro pueblo.

Oremos:  Dios, te conocemos, desde la misma creación, desde cada amanecer, en cada cántico del ave, en cada acción creadora de la vida. Te pido que nuestras vidas, al oír tu voz, sientan esperanza y fuerza. No desampares la obra de tus manos porque tu pueblo espera en ti. En el nombre de Jesús, amén.