¡Busquemos su rostro! ¡ya!

Oseas 4:1-3,6; 5:4,6,15; 7:13,15; 10:2,12-14

Los hijos matan sus progenitores. Los progenitores matan y violentan sus hijos/hijas. El quitar la vida se ha tornado en un juego de computadora, playstation, Xbox, etc. Los tiempos que vivimos están violentados por la sangre que corre en nuestra Isla. El sistema gubernamental solo alcanza a proponer soluciones efimeras e insuficientes a la realidad social. Nuestra realidad es dolorosa y sangrienta. ¿Qué hacer? ¿Cómo enfrentar esto?

Es tiempo de buscar a Dios. El profeta Oseas le decía al pueblo: "porque es el tiempo de buscar a Jehová, hasta que venga y os enseñe justicia", Oseas 10.12
Me parece que la gente aparenta buscar a Dios, pero solo viven dando vueltas como el pueblo de Israel. El arado que tienen en las manos es el de la impiedad y cuando nuestro arado es el de la impiedad, lo que segamos es iniquidad. El fruto es la mentira. La mentira se ha tornado en un espiritu muy común. Reprendemos la mentira en el nombre de Jesús. La verdad se ha tirado a la basura para adueñarnos de la mentira. El profeta Oseas expresaba: "porque no hay verdad, ni misericordia, ni conocimiento de Dios en la tierra",Oseas 4.1. ¿Eso no es lo que estamos viviendo en Puerto Rico? Las palabras del profeta siguen vigente y siguen vigente porque son Palabra de Dios. Toda palabra que invoque la justicia y la verdad es de Dios. Continua el profeta diciendo: "Perjurar, mentir, matar, hurtar y adulterar prevalecen, y homicidio tras homicidio se suceden",Oseas 4.2. ¿Que tal eso? ¿Retrata a Puerto Rico verdad?

Estas acciones mencionadas son las que provocan que el pueblo sea destruido. Es por ello que el profeta le dice que "la destrucción del pueblo fue por falta de conocimiento". No hay deseos de volverse a Dios porque en los pensamientos hay fornicación y no conocen a Dios. Quien conoce a Dios entra en el principio de la sabiduría.

El profeta da una respuesta contundente ante la crisis del pueblo y quiero compartirla con mi país tambien. Creo que la necesitamos.

Oseas 5.15 "Andaré y volveré a mi lugar, hasta que reconozcan su pecado y busquen mi rostro..."

Buscar el rostro del Señor será nuestra esperanza. Nosotros/nosotras estamos ante el Dios de las oportunidades. No dudes en creerle y buscarle porque ¡hay de aquellos que se aparten de mi! Dios les redimió, se apartaron y hablan mal de Dios. Dios les forteleció, les limpió, les sanó, pero no entendieron y se apartaron. El profeta brinta, ante el caos social que vivimos, una alternativa viable para hoy.

¡"Busquen mi rostro..."! Oseas 5.15

Oremos: Señor y Dios mio. Acercarme a ti cada día me hace fuerte en tiempos de crisis. Perdón por las veces que, ciertamente, he pecado. Ayudanos para que como pueblo seamos diferentes. Libranos del mal y de la tentación para ser fuertes en medio del dolor. En este momento deten la mano del que maltrata a una mujer, de quien quiere violar a un hijo, una niña, cuida a quien vive en intentos de suicidio, reprendo en tu nombre a quienes quieren hacerle daño a nuestra nación. Tú eres nuestro Dios y clamamos a ti para que turbes los planes del enemigo. Sustenta al caído y vuélvete a nosotros/nosotras porque solo queremos buscar tu rostro. En el nombre de Jesús, Amén.