"un ca-fe
con dios"
Rvdo. José L. Báez báez
"Hay camino que al hombre le parece derecho; pero su fin es camino de muerte" Prov. 14.12
Nuestra simple humanidad es limitada para ver lo falso y lo verdadero. La revelación de Dios es fuente infalible que nos ayuda a determinar la senda derecha de la vida. Quien no mira por dónde anda tarde o temprano tropieza. No te confíes de lo que ves atractivo y fácil porque puede representar tu final. Seguir el buen consejo puede ayudarte en la senda de la vida. No hagas caso de quienes viven como quieren. Ellos ya lo han perdido todo, incluso, el propósito de vivir. El que quiere dejar lo que tiene porque no es lo mismo puede encontrar una pared de frente. No sostengas tus pasos sobre la senda inútil. El camino de Dios lleva a la vida pero el camino propio tiene un fin en sí mismo. Oremos: Dios que en Jesús volviste a hacerte camino. Caminar es mi llamado a la eternidad. Si camino contigo mi camino no es de muerte sino de vida. Que siempre pueda ir tras de ti no importa la manera en que sea el camino. Si es contigo me lleva a la vida. En el nombre de Jesús, amén.
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Las moscas muertas hacen heder y dar mal olor al perfume del perfumista; así una pequeña locura, al que es estimado como sabio y honorable. (Eclesiastés 10.1)
Una necedad insignificante puede neutralizar los efectos de la sabiduría. NO hagas nada de lo que luego te arrepientas. Actuar pensadamente es no permitir que lo desequilibrado o pequeña locura dañe lo que es sabio y honorable. Una mala decisión o un pequeño error puede destruir todo lo que has logrado. En ocasiones, por impulsividad, cometemos los errores más atroces. Los planes y las metas tienen fin cuando actuamos neciamente. No permitas que tu estima y sabiduría culmine en hedor a causa de tus propios pasos. Oremos: Dios y Padre de nuestras vidas. Tu eres tres veces santo. Eres el Creador del cielo y la tierra. Me acerco a ti para que cada día me des discernimiento en todo lo que tengo que hacer. Estoy convencido de que hacer planes sin ti implica errar y actuar desde la locura. Gracias porque tu misericordia nos permite ver cada mañana como una oportunidad para actuar sabiamente. En el nombre de Jesús, amén. La Navidad desvela algo nuevo, inimaginable. Es el nacimiento de un niño que se llama Emanuel, (Dios con nosotros). Es Dios revestido de nuestra propia condición humana, en quien se hace visible el Misterio. Un Dios sobre todo que ama a los seres humanos. Nos muestra que nuestra condición finita y frágil tiene para él valor inestimable. Eso solo es posible si hay amor. Esta Navidad vierte sobre los demás lo que Dios vertió sobre ti. Ama al diferente y al extranjero con las mismas fuerzas que Dios lo hizo por la humanidad. La Navidad es Dios en nuestras vidas y en los demás.
Oremos: Dios de bondad y amor; Dios que revelas tu eterno acompañamiento en la Navidad; Dios que enriqueces nuestras vidas con tu presencia; Gracias porque no permitiste que hiciéramos imágenes de ti sino que tú te hiciste a imagen nuestra desde un humilde pesebre. Nuestra dignidad inviolable tiene el rasgo de tu amor. Gracias, Emanuel, amén. Basado en el libro de Juan Martín Velasco "¡Ojalá Escuchéis hoy su voz!" "yo soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia". Isaías 41:10
Cuando Dios no coloca en un lugar es para hacer su voluntad. Es por ello que su cuidado no faltará y nadie te podrá hacer frente. ¿Quién dijo que no es posible? Si Dios es por ti quién contra ti. Él te esfuerza, te ayuda, te sustenta. ¿Algo más? Nadie puede arruinar tu día. Lo que Dios hace por ti permite que puedas caminar en confianza. Quita tu mirada de tus problemas y deja que Dios haga. ¿Hasta cuándo vas a intentar controlar las cosas? Dios es el único capaz de dominarlo todo. Él sabe cómo hacer las cosas porque su mirada está por encima de la tuya. Cree y camina. Es posible que tus fuerzas mengüen pero Dios lo sabe y si eres capaz de creerle y confiar en sus fuerzas verás su mano. "no temas porque yo estoy contigo..."¿Te parece poco? Deja tus temores en las manos de Dios y sus manos controlarán lo incontrolable. Oremos: Dios que estás sobre todas las cosas. Dios que cuidas a tus hijos/hijas. Dios que no abandona a los suyos. Si hay alguien lleno de temores y miedos déjale saber que tú eres su mejor compañía. Que tú le das fuerzas para enfrentar su situación, para pelear la buena batalla, para levantarse, para caminar, para creer, para soñar, para enfrentar, para confiar en todo tiempo. En el nombre de Jesús, amén. "Levantad en alto vuestros ojos... Dios no se fatiga con cansancio y su entendimiento no hay quien lo alcance... El da esfuerzo al cansado, y multiplica las fuerzas al que no tiene ningunas ... muchos se fatigan y se cansan y otros flaquean y caen, pero los que esperan a Dios tendrán nuevas fuerzas, levantarás alas como las águilas y no se cansarán, caminarán y no se fatigarán". Isaías 40.25-31
Este mundo anda fatigado, en constantes horas de agobio. La gente dice que necesita 48 horas para realizar sus agendas. La gente va de un lado a otro "cansados, sin fuerzas, e incluso sin propósitos". Todo está en un correr, de manera acelerada. Parece que estamos dentro de un microonda y que el ritmo de nuestra vida se mueve a su ritmo. NO se descansa, se tiene poca meditación, no se reflexiona, y mucho menos se levantan a lo alto nuestros ojos. En Dios no hay fatiga y da esfuerzo al cansado y multiplica las fuerzas al que no tiene ningunas... La fatiga, el cansancio, la flaqueza y la caída son elementos que definen lo que ocurre hoy. Si alzamos nuestros ojos y miramos a Dios y esperamos en él "tendrás nuevas fuerzas, levantarás alas como águilas y no te cansarás, caminarás y no te fatigarás". El diario vivir provoca cansancio, fatiga, flaquezas y caídas pero Dios da fuerzas y descanso. Nuestra esperanza es Dios ¿con quién lo comparas? Dios es Dios y de él viene todo cuanto existe. Te llama por tu nombre y nada faltará tal es su dominio. No permitas que la debilidad, el cansancio, la fatiga, la caída sea tu manera de vivir. Dios te levanta, te da fuerzas, te hace tener esperanza si esperas en él. ¿Quién puede alcanzar a Dios? Lo que llevas sobre tus hombros puede hacer tus pasos lentos, pero si levantas los ojos a Dios podrás levantar alas como las águilas y ni habrá cansancio ni fatiga. Oremos: Dios yo sé que todo lo que veo es creación tuya. Existe por tu mano y tu palabra. Nada falta en los días y las noches. Tú no detienes tu misericordia y bondad. Nuestro cansancio y falta de fuerzas tiene fin en tu nombre. Fortalece a tu pueblo en medio de la crisis y no permitas que se canse y se fatigue. En ti siempre encontraremos esperanza. Nuestra mirada se sostiene en ti. Aquí estamos Señor. En el nombre de Jesús, amén. "... Han visto mis ojos tu salvación ..." S. Lucas 2.30
Esta fue la expresión de Simeón cuando vio a Jesús. Es la expresión de alegría, de espera, de promesa cumplida. Cuando acepté al Señor y me di cuenta de todo el tiempo que había perdido no lo podía creer. En Jesús se cumple toda promesa y profecía. Haberle visto es lo más hermoso que puede pasarle a un ser humano. ¿Le has visto? Quizás me digas que no, pero si sirve de algo, creerle sin verle es una bienaventuranza. Ya yo le creí ¿y tú? Este día es una oportunidad linda de Dios para ver más que lo que tienes a tu alrededor. Es el día para contemplar la salvación, de Jesús, en nuestras vidas. No dejes para mañana lo que puedes ver hoy. "han visto mis ojos tu salvación". Oremos: Dios y Salvador. Conforme a tu palabra, también mis ojos te han visto. Te han visto en cada amanecer, en cada día, en cada atardecer, en cada anochecer, en cada acto creativo con el que nos bendices. Te he visto en mi familia, en mis amigos, en mis compañeros de ministerio, en cada espacio de alegría y paz. Gracias por que la salvación implica eternidad y de eso tú sabes. En el nombre de Jesús, amén. "Hubiera yo desmayado, sino creyese que veré la bondad de Jehová, en la tierra de los vivientes". (Salmo 27.13)
Confiar en Dios y experimentar su bondad son indispensables. La fe tiene como fundamento la perseverancia. Las pruebas son severas, pero mantener la cordura no permitirá que nos desesperemos. No te desesperes a causa de la prueba porque claudicarás y desmayarás. Si tus ojos están puestos en Dios la desesperación y el claudicar no serán parte de tu proceso. Podrán asomarse el desaliento y la tristeza pero ya tienen su final ante la bondad de Dios. Creer en la acción de Dios es la experiencia de fe que nos permitirá ver su bondad en esta tierra. Yo lo creo. No desmayes y verás la bondad de Dios. Lo que necesitas ver lo verás si confías en la bondad de Dios. Oremos: Dios que en medio de las tinieblas se revela para crear, que en medio de la crisis levanta y mueve sus brazos a favor nuestro. A ti y en ti colocamos nuestros ojos para ver. En ti siempre veremos porque nuestra confianza está colocada en tu misericordia. En el nombre de Jesús, Señor nuestro, amén. "Mirad, pues con diligencia cómo andéis, no como necios sino como sabios, aprovechando bien el tiempo, porque los días son malos". (Efesios 5.15-16)
Ese asunto de mirar está en los labios de nuestros seres queridos. "Mira por dónde andas", "ten cuidado y mira para el frente", "mira bien", etc. No podemos caminar como necios o insensatos sino como sabios. No hay tiempo para estar en la vida viviendo sin aprender. En el aprender de la vida andamos con sabiduría. Hay que aprovechar, redimir, el tiempo porque los días son malos. No podemos cerrar los ojos a nuestra realidad, porque ese es el mandato "mirad". Si miramos y los días son malos, entonces, ¿seguiremos en los mismos pasos? Andemos diligentemente y enfrentemos nuestros días con sabiduría. ¿Cómo andas? Oremos: Dios de toda sabiduría. Mira nuestros días y ayúdanos a caminar con sabiduría. No permitas que la necedad inunde nuestras acciones. La maldad de los días no deterioren nuestra esperanza y provoquen mirar en ellos lo que debemos aprender para que luego no andemos en necedad. En el nombre de Jesús, amén. "Sustenta mis pasos en tus caminos, para que mis pies no resbalen". Salmo 17.5
Hablar de caminos y resbalones me trae a la memoria los tiempos en los que me crié. El camino era en tierra y cuando llovía el bache era el espacio para que pudiéramos caer y ensuciarnos en cualquier momento. De manera que el problema no era el camino. Cuando se conjugaban el agua, la tierra, y mis pasos tenía lugar el evento del que estamos hablando. NO quiero olvidar que en lo seco también me llegué a caer. Un paso en falso podía provocar que mis pasos no se sostuvieran y llegara el resbalón. Las veces que resbalé lo que tenía en las manos volaba sin control y lo que pudiera quedarse terminaba tan enfangado como yo. El camino en sí era difícil pero dar pasos en falso lo complicaba. Por lo tanto, en los días difíciles tenía que saber en qué lugar tenía que pisar para no resbalar. En nuestra vida es igual. Cuando se conjugan los tiempos difíciles y nuestros pasos podemos resbalar y caer feamente. Los altibajos de la vida no están fuera del camino sino en el camino. Saber enfrentarlos es evitar caer. ¿Dónde están nuestros pasos? ¿En qué caminos? ¿Caminaremos en los mismos pasos sabiendo que resbalaremos? ¿No le parece un acto de ignorancia? ¿Seguiremos en aquellos pasos que no permitirán que mi vida tenga sentido? Si quieres seguir cayendo, si quieres seguir enfangado, si quieres que tus pasos sigan en el mismo camino, entonces no reclames los resbalones. Resbalar es de humanos pero cambiar la dirección de nuestros pasos también. De Dios es sostenerlos en el camino para que nuestros pies no resbalen. Se puede resbalar en cualquier lugar. Ese no es el problema, sino que quien sustente mis pasos no permita que resbale. Mis pasos los sostiene Dios y le pido que mis pies no resbalen. Oremos: Señor y Dios del camino. Sé que hay peñascos, barrancos, cuestas, bajadas, pero mi confianza está en que tú sustentas mis pasos en tus caminos. Ayúdanos a no resbalar y si así fuera que tu mano nos asista. En el nombre de Jesús, amén. Lucas 1.28
¿Qué tal si llega un ángel de repente? De entrada el susto es más grande que el encuentro. Ese ángel (Gabriel) enviado por Dios a una virgen (María). Si de escuchar la puerta sonar en casa me asusto ¿qué será que se me aparezca un ángel? NO es que yo sea un miedoso es que es un evento extraordinario, inusual, insuperable, pero sobre todo sublime. NO es que haya llegado el ángel es que entró donde ella estaba ... (Lucas 1.28). ¿Por qué? 1. Era muy favorecida 2. El Señor estaba con ella 3. Bendita entre todas las mujeres Todo esto acontecía porque María había hallado gracia delante de Dios. Quiera Dios que nuestras experiencias con Dios contengan los elementos con los que contaba María. Que seamos favorecidos, que el Señor esté con nosotros y que seamos benditos entre todos/todas. ¿Tendremos gracia delante de Dios? Oremos: Dios y padre de nuestras vidas. Que revelas tus intenciones salvadoras de manera sublime y misteriosa. Tú que sigues entrando a nuestras vidas, como el ángel entró donde estaba María, de manera sublime, repentina, etc. Te pido que encuentres en cada uno de nosotros/nosotras lo que hallaste en María para ser vientre de salvación y vida. Permite que cada encuentro contigo también sea lleno de gracia. Ayudanos a caminar y mirar la vida con la misma humildad que lo hizo la virgen María. Su ejemplo es y será uno digno de imitar. Una mujer que se guardó y respondió con respeto. En el nombre de Jesús, amén. |
AutorPastor José Báez Báez Categorías
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September 2017
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